Caracoles y limacos

Son la pesadilla de los hortelanos y ahora, que va llegando el tiempo de ocuparnos de nuestra huerta, vamos a ver en este post cómo son y cómo nos podemos librarnos de ellos de una forma ecológica. Hoy nos ponemos un poco babosos porque la cosa va de caracoles y limacos.
Caracoles
Necesitan un ambiente húmedo para desplazarse sin problemas y mucho calcio para mantener su concha en buen estado. A pesar de ser hermafroditas se aparean para la reproducción. Ponen sus huevos bajo tierra.


Babosas
Son muy sensibles al frío. Para combatirlo se esconden bajo tierra Como los caracoles, necesitan humedad. Tampoco les gustan las temperaturas muy altas del verano. Por eso es más fácil verlas al amanecer o al atardecer.


Trucos para mantenerlos alejados de nuestras plantas.
-Como necesitan humedad para arrastrarse son incapaces de atravesar la ceniza. Si el tiempo va seco, basta rodear nuestros cultivos con ceniza para impedir su ataque. El problema es que cuando llueve, y la ceniza se moja, esta deja de ser un obstáculo insalvable.
-Otra solución para hacer una barrera es poner cáscaras de huevo rotas.
-Hay quien prefiere poner trampas. Las hay preparadas pero son muy fáciles de hacer. Basta enterrar un bote a ras de suelo con un poco de cerveza que les atraiga. Pero recuerda vaciarlas a menudo porque si no el olor es francamente desagradable.
-Si eres de los que no quiere complicarse la vida tenemos un veneno ecológico a base de sulfato de hierro. Resistente a la lluvia, sin plazo de seguridad y respetuoso con las mascotas y los erizos.


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